CENTRAL "SANTA LUCIA"

Gibara, Oriente, Cuba

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El Central | Las Tierras del Ingenio | El Molino | El Ferrocarril | El Puerto | Una originalidad de este ingenio

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El Central

Este Central es, sin duda, una de las más antiguas propiedades cubanas. Su fundador, Don Rafael Lucas Sánchez Hill, lo estableció por el año de 1857, o sea a mediados de la pasada centuria. Cuenta, por tanta, este ingenio casi tres cuartos de siglo de existencia.

Era Don Rafael Lucas Sánchez hombre de recia y antigua estirpe cubana (1) , bien relacionado y de excepcionales dotes para los negocios; y aunque había sido, hasta entonces, la ciudad de Matanzas cuna de su familia y centro de sus actividades, las tierras de Oriente, vírgenes aún, le atrajeron como una promesa fascinadora para el futuro, y allá sé trasladó en busca de la que habría de representar más tarde la verdadera tierra prometida de los grandes centros azucareros de Cuba.

No se llamó al principio "Santa Lucía" la finca de que nos ocupamos. Dióle su primer nombre el río Guabajaney, que es uno de los que riegan aquellas feraces tierras.

Un rudimentario "tren común", como entonces se denominaba, esto es, algo menos de lo que actualmente se llama con frases gráficas "un cachimbo", que elaboraba apenas unos cientos de bocoyes de azúcar mascabado, era todo cuanto constituía el primitivo ingenio "Guabajaney".

La constancia inquebrantable en el trabajo, alentada por una laudable y natural ambición de prosperidad, y el perseverante esfuerzo de los hijos del fundador transformaron aquel "cachimbo", años más tarde, en un Central azucarero, que ha llegado a convertirse en un verdadero emporio de riqueza,

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Al escribir la historia del Central "Santa Lucia", no puede omitirse hacer resaltar las especiales condiciones que lo distinguen de casi todos los demás ingenios actuales, condiciones que se refieren a su origen, a su desenvolvimiento y a su organización.

Debióse su fundación, come queda dicho, al esfuerzo individual de una persona, no, como en la generalidad de los casos, a la asociación de elementos y capitales diversos. Para su desenvolvimiento sólo ha contado con la cooperación exclusivamente familiar de los sucesores de Don Rafael Lucas Sánchez, y ha podido conservar, a través de tantos años como cuenta, la misma organización originaria, en la que han llegado a resumirse los esfuerzos de tres generaciones de cubanos.

La "Santa Lucia Company S.A.", es una empresa organizada de acuerdo con las leyes nacionales, y sus actuales componentes son todavía los sucesores del antiguo fundador, sin mezcla ni agregación de elementos extraños.

No hace falta decir que esta propiedad, vinculada en una de las más antiguas familias de Cuba ha supervivido a las grandes crisis que han conmovido la principal industria nacional, gracias a su misma organización, en cuyo defensa no se escatimaron nunca sacrificios de todo genero.

Nuestras guerras por la Independencia fueron para el ingenio "Santa Lucia" épocas de vicisitudes y quebrantos, hasta el punto de que en más de una ocasión sus propietarios creyeron ver desaparecido para siempre el producto de sus afanes. La libertad de Cuba y su consecuente prosperidad vinieron a afianzar, al fin, las condiciones de vida, adelanto y estabilidad de esta valiosa obra, como las de tantas otras que han podido salvarse en medio de peligros que parecían definitivos e insuperables.

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Las Tierras del Ingenio

No llegaban a una tercera parte de su actual extensión las tierras en que fue fomentado el primitivo ingenio "Guabajaney". Adquisiciones sucesivas, muchas de ellas costosísimas, han triplicado las tierras del Central "Santa Lucía" en los últimos tiempos.

Las fincas y lotes de terreno que hoy lo integran abarcan una cabida de tres mil doscientas caballerías de tierra, aproximadamente, constituyendo la zona fomentada, mil ciento cincuenta y cinco caballerías de tierra sembrada de caña, divididas en cuatro departamentos. Sobre trescientas caballerías más están dedicadas a potrero y las restantes son de monte firme y sabana.

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El Molino

La planta de moler del ingenio "Santa Lucia" ha seguido las mismas transformaciones que la industria moderna ha experimentado en el ramo de la mecánica. Entre el primitivo "tren común" instalado en el año 1857 y la planta de moler con que cuenta actualmente el ingenio, media tan incalculable diferencia, que apenas es creíble que ambas cosas estuvieran destinadas a un mismo fin y se basaran en el mismo principio de aplicación. Aquel "tren común" fue sustituido en el año de 1881 por masas y trapiches de reciente invención entonces, pero éstos, a su vez, fueron reemplazados en 1911 por los 'tandems' que ahora existen. A pesar de ello, los constantes adelantos en materia de maquinarias para ingenios vienen completando y perfeccionando, año tras año, el sistema de moler que allí se emplea.

La referida planta le moler se compone de dos juegos de máquinas o 'tandems', sistema "Prats" y "Farrel", con capacidad para producir trescientos cincuenta mil sacos de azúcar de 13 y medio arrobas cada uno. Consta el primer 'tandem' de masas de siete pies de largo, con una predesmenuzadora de sistema "Prats" y cuatro trapiches. El segundo juego de máquinas se compone de masas siete pies de largo, una desmenuzadora de sistema "Fulton" y tres trapiches.

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El Ferrocarril

Las vías férreas con que cuenta este ingenio tienen una extensión de 160 kilómetros; son de 30 pulgadas de ancho y sus carriles de 45 ó 60 libras.

El material rodante se compone de doce locomotoras, nueve grandes y tres pequeñas; 549 carros para caña, 48 casillas para azúcar y mercancías, 14 carros-tanque para mieles y petróleo y seis carros para pasajeros.

Uno de los ramales del ferrocarril comunica el batey del Central con la línea de ferrocarril de Gibara y Holguín, en la estación de Iberia, que dista 27 kilómetros de "Santa Lucía".

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El Puerto

Las tierras pertenecientes a "Santa Lucía" se extienden, en un gran trecho, por la costa Norte de la provincia oriental, en las inmediaciones de Gibara.

Amplios y bien abrigados puertos naturales, entre los que son principales Puerto Naranjo, Vita, Bariay, Jurujú y la bahía de Samá, con calado suficiente para buques de alta travesía, favorecen de manera privilegiada la situación geográfica de este Central, permitiéndole embarcar sus azúcares directamente desde el ingenio por sus propias líneas.

De todos dichos puertos, es el de Vita el que se utiliza por la compañía, por ser el único que se halla habilitado oficialmente para la navegación de cabotaje y para la importación y exportación en general, en concepto de sub-puerto del de Gibara.

La bahía de Vita es profunda y bien resguardada, con calado de 191/2 pies en la boca y 25 pies en el muelle, al cual pueden atracar hasta cuatro vapores de travesía a un mismo tiempo.

Posee la Compañía en el puerto un tanque de petróleo con capacidad para un millón de galones y dos tanques para mieles con una capacidad de ochocientos cincuenta mil galones. La descarga del petróleo se hace directamente del vapor por medio de bombas, y la carga de las mieles por su propia gravedad.

Posee, además, la Compañía, en las inmediaciones del puerto, un almacén o depósito de azúcar, con capacidad para setenta y cinco mil sacos, que es suficiente a las necesidades del ingenio, toda vez que los embarques pueden hacerse directamente desde el envasadero.

El puerto de Vita dista del de New York mil cien millas, aproximadamente, o sea una distancia menor que el puerto de La Habana.

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Una originalidad de este ingenio

Representa realmente una originalidad del Central "Santa Lucía" el sistema que emplea para la liquidación y pago de las cañas de los colonos, que fue implantado desde los primeros tiempos de su fundación.

Consiste este sistema, que es único en Cuba, en la liquidación de las cañas a base de su valor proporcional en azúcar, aplicando unas tablas equitativas, que fueron detenidamente estudiadas y formuladas de mutuo acuerdo entre los primitivos dueños del ingenio y sus primeros colonos.

Mediante tal sistema, el ingenio paga en proporción del azúcar que contenga la caña, lo que obliga al colono a la asistencia y buen cultivo de sus campos, como único medio de acrecentar y mejorar el resultado económico de su producción.

Por otra parte, la circunstancia de que este ingenio, por inveterada costumbre, rinde su zafra en un periodo de tiempo extraordinariamente largo, que comprende un promedio de diez meses del año, el sistema del valor proporcional es el único adecuado y justo para la liquidación de las cañas, pues en cierta época de zafra el rendimiento en azúcar ha de ser forzosamente mucho más bajo que en otras, lo que impone la consiguiente fluctuación en el valor de las mismas cañas.

Antes de cerrar con estas líneas de historia y descripción del Central "Santa Lucía", plácenos dejar consignados los nombres de los hijos de Don Rafael Lucas Sánchez Hill, que consagraron la mejor parte de su vida al desarrollo y mejoramiento de la hermoso obra que les legó su ilustre antecesor. Ellos fueron: Don Rafael Eusebio Sánchez y Sánchez y Don Alberto y Don Federico Sánchez y Junco, ya difuntos.

Recursos:
El LIBRO DE CUBA,  La Habana, Cuba, 15 de febrero de 1925

Anotaciones:
(1) 
Don Rafael Lucas Sánchez y Hill nacio el 24 de octubre de 1808 en St.Augustine,Florida y murio el 13 de mayo de 1878 en La Habana, Cuba.
Una placa en la entrada de la casa designa esta como un sitio historico nacional en la calle St. George Nro. 105 en St. Augustine, Fl.

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Puesta al día: 08/11/2013